Tipos legales

Iniciado por Dragondave, 08 de Abril de 2013, 09:51:48 PM

Tema anterior - Siguiente tema

0 Miembros y 2 Visitantes están viendo este tema.

Dragondave

TIPOS LEGALES


Sinopsis:

Val (Al Pacino) sale de la cárcel tras cumplir 28 años de condena. Su mejor amigo, Doc (Christopher Walken) le espera a la salida y juntos van en busca de otro viejo colega, Hirsch (Alan Arkin). A pesar de la edad, los tres ex gánsteres deciden empezar a recuperar esa misma noche los días de gloria y las décadas de crimen, drogas y sexo perdidas. Pero Doc tiene un trabajo urgente que hacer, encomendado por el jefe de la antigua banda: matar a Val y saldar así su propia cuenta pendiente. El dilema para un gánster es imposible y el tiempo para encontrar una salida se agota.

Crítica:

Las batallitas del abuelo


Los ejercicios nostálgicos suelen tener un buen recibimiento. Jugar con los recuerdos, viejas glorias, la infancia... nos gusta a veces anclarnos en el pasado y la moda retro, y es que ya se sabe, cualquier tiempo pasado fue mejor, como decía Jorge Manrique.

Tirando de esta premisa, nos llega Tipos legales, donde tres gángsters, ya retirados, rememorarán por última vez sus viejas correrías, mientras terminarán un último trabajo pendiente.

Y quien mejor para este ejercicio nostágico que Fisher Stevens, instalado en la memoria colectiva como el actor de de las dos Cortocircuito y, en menor medida, Super Mario Bros; aparte de numerosas apariciones en varias series de éxito.

Ahora, en su faceta de director, tras la pobre aceptación por parte del público de su debut Beso en Manhattan, pero haber conseguido un Oscar por la producción del documental Cove, nos ofrece una película liviana, una tragicomedia (bastante más cómica que trágica) sin mayores aspiraciones que apelar a la memoria colectiva, bien para los films de culto del subgénero gangster, por ver a viejas glorias del cine una vez más en acción y juntos o simplemente por ver a unos ancianos con síndrome de Peter Pan, que siempre tiene su aquel.

Está claro que para que esta propuesta funcionase medianamente bien, era necesario un reparto a la altura de lo que se cuenta, viejas glorias que nos creen simplemente con verlas ese viaje mental al pasado, Al Pacino, Christopher Walken y Alan Arkin, un trío de ases que, si bien no será un papel que se recordará el día de su epitafio, tampoco será el que les haga avergonzarse cuando estén de fiesta con otros colegas del gremio y salga a relucir dicha colaboración. Da un poco de pena verles tan cascados, pero aún siguen recordándonos por qué son tan grandes, una simple mirada o gesto sirven para llenar la pantalla.



Sin tomársela muy en serio, se puede pasar un buen rato, siempre entrando en su juego, sin esperar un guión muy elaborando y pasando por alto alguna escena de, vulgarmente hablando, empalmado (a veces, hasta literalmente). Hubiera sido interesante un tratamiento más adulto-crepuscular, acorde a la temática, pero eso sería ya tener ciertas pretensiones que Fisher Stevens dudo que siquiera se haya planteado. Habrá que conformarse con algún que otro guiño cinéfilo, ver a tres pedazos de actores pasándoselo pipa y pasar un rato entretenido, que tampoco está mal.

Y para rematar la añoranza, Jon Bon Jovi en la banda sonora, con uno de los dos temas incluso nominado a los Globos de Oro

En general, la película puede verse como las batallitas que suelen contar los abuelos, en cierta parte poco novedosas (porque se repiten como el ajo) y a veces cansinos si les escuchamos superficialmente, pero si realmente nos sentamos a escuchar lo que dice, encontraremos historias divertidas, emotivas, pero, sobre todo, apreciaremos más a aquellos que ya ha vivido el doble (como mínimo) que nosotros.

6/10
  •  

Ignasss

Bastante de acuerdo, muy buena crítica. Vengo a decir más o menos lo mismo :poss

Arrugas
Esta visto y comprobado por 'Los Mercenarios' que las películas formadas como homenajes o cantos a la nostalgia funcionan muy bien. Cosa que o me extraña demasiado, estando como está el Hollywood más comercial no viene mal mirar hacia atrás esporádicamente. 'Tipos Legales' ofrece algo parecido reuniendo a 3 grandes actores que ya han sobrepasado los 70.

El trío protagonista interpretan a unos gánsteres retirados que se reúnen cuando uno de ellos sale de la cárcel. El problema es que a uno de ellos le han encargado matar a su viejo amigo.
Con esta sencilla premisa se nos cuenta una historia sobre la vejez, y es que los años pasan para todos, sin detenerse ni por el mismo Michael Corleone. Por suerte es narrada en forma de comedia, lo que disminuye el bajón inicial que te da al ver estos 3 actorazos tan chafados por la edad. Pero aun así la película toma un ritmo rápido, sin necesidad de bastones, creyéndose unos chavales.

Es ese el motivo por el cual el film apenas contiene momentos realmente adultos e intenta ir siempre hacia una comedia que en ocasiones se pasa de previsible (el evidente chiste de la viagra se aprovecha durante unos 15 minutos). Lo cierto es que es más simpática que divertida. Y eso se debe a su trío de carismáticos gánsters que con solo una mirada o una mueca demuestran que siguen siendo los que un día ganaron sus respectivos Oscars.

En ocasiones la película aspira a algo más siendo también un homenaje al cine de gánsters gracias a una fotografía oscura y una banda sonora maravillosa formada por tonos de blues y soul (también escuchamos a Bon Jovi por ahí).     

En definitiva, 'Tipos Legales' es una película que vale la pena por ver a esos 3 actores juntos en un desorbitado derroche de carisma. Aunque como comedia tenga sus subidas y bajadas, no es ni mucho menos una mala película y eso, últimamente, ya dice mucho a su favor.
6/10
  •  

reporter

Cosas que despilfarrar cuando estás muerto

Es curioso como, más de una década después, los detractores de esa obra maestra titulada 'Salvar al soldado Ryan' siguen intentando cargársela haciendo uso de un argumento que la propia película se encarga de inutilizar, pequeño detalle que seguramente se les escape por razones apriorísticas que ahora mismo no vienen al caso. Lo que sí importa es que aquello es un absoluto disparate patriótico. Porqué, ¿quién demonios va a creerse que se arriesgarían las vidas de tantos hombres para salvar la de uno solo que, por muchos hermanos muertos que se le hayan confirmado, de ninguna de las maneras va a marcar la diferencia en una guerra que debería estar en lo más alto de cualquier lista de prioridades? A dicha argumentación no le falta razón, pero su poder como arma arrojadiza queda invalidado desde el mismo momento en que el filme toma conciencia de ello y hace que sus protagonistas constaten el terrible absurdo al que han sido sometidos.

Pero la cadena de mando manda, nunca mejor dicho, y las órdenes de arriba deben cumplirse a rajatabla. Lo sabía el Capitán Miller... pero sus hombres no lo tenían tan claro. La disconformidad era el sentimiento generalizado, pero el que mejor cuerpo supo darle al malcontento fue el francotirador Jackson, a quien aquella misión le parecía un crimen, al suponer ésta un imperdonable despilfarro de potencial militar. Juraba que, si en vez de hacerle cruzar media Francia en busca de un niñato de quien ni siquiera se sabía si estaba vivo o muerto, le colocaban a una distancia razonable del Führer y con un fusil cargado y calibrado, la Gran Guerra se acabaría en menos que canta un gallo. Ahí estaba el verdadero drama para su ejército: y es que a los mejores soldados no se les puede entretener con tonterías; a ellos hay que asignarles las grandes misiones.


Con 'Tipos legales' uno llega a la misma conclusión. Ve, antes de entrar a la sala, el cartel, lee los nombres que figuran en él y se le cae la baba. Al Pacino, Chritopher Walken y Alan Arkin juntos en una última noche de juerga que promete emociones fuertes. El primero de ellos sale de la cárcel después de cumplir larguísima condena, pero la recuperación de la libertad viene con una implacable e irrevocable sentencia de muerte dictada por un mafioso que no ha olvidado los pecados del pasado. Pacino lo sabe, Walken también... Arkin, la verdad, solo pasa por ahí, pero el fantasma de la muerte también se cierne sobre él, así lo atestigua una bombona de oxígeno que se ha convertido en su inseparable compañero de penas. La prisión, la residencia de ancianos y la claustrofóbica soledad del viejo al que cada día le quedan menos personas que se acuerden de él.

''Cosas que hacer en California cuando estás a punto de morir'' podría haber sido una buena frase promocional para esta película (total, con las que tenemos que tragarnos semana sí, semana también...), pues el planteamiento inicial no defiere en exceso de lo que se cocía en el Denver de Gary Fleder. La principal distinción salta a la vista y la revela, como era de esperar, el tráiler: se conserva el toque criminal, pero se elimina el romance y el drama para dejar hueco a una comedia que, vistos los ingredientes barajados, adquiere una tonalidad negra que compramos sin pensarlo dos veces. Los viejos roqueros se apuntan a la fiebre ''resacón'' y se van de farra, desafiando todas las leyes de la biología. ¿Cuidado al bajar las escaleras? ¿No olvidarse de tomar las pastillas? ¿Hacer los ejercicios memorísticos cada mañana? Nuestros héroes se ríen de todo esto.

El problema es que, por muy bien que se lo pasen, cuesta horrores sumarse a su fiesta. El actor documentalista Fisher Stevens (''George Minkowski'' para los amigos de LOST) falla a la hora de contagiarnos la comicidad y -sí- la vida de un guión que, para ser justos, no va precisamente sobrado de ninguno de estos dos activos. La juerga avanza inexorablemente y sin rumbo aparente hacia una supuesta catarsis final y con ella se suceden las drogas, los tacos, los polvos y los estallidos de violencia, elementos que deben su comicidad tanto a sus inherentes connotaciones gamberras (que en el mejor de los casos se quedan en lo entrañable y en el peor en lo artificial) como a la edad de unos actores que incluso en un producto tan mediocre demuestran su buen saber hacer. Walken y Arkin confirman que les vamos a echar mucho de menos... lo mismo sucede con Pacino, aunque en su caso, verle supone ya un acto demasiado próximo a la despedida prematura. Es triste, casi tanto como ver que el reloj está a punto de detenerse... pero no tanto como darse cuenta, mientras se está cavando la tumba, de que con todo a favor; gozando de un potencial tan impresionante, al final se optó simplemente por pasar un buen rato; por las cuatro risas insustanciales... en definitiva, se optó por el despilfarro.


Nota: 5 / 10
  •  

Wanchope

Cita de: reporter en 13 de Abril de 2013, 07:12:27 PM
El problema es que, por muy bien que se lo pasen, cuesta horrores sumarse a su fiesta.

He aquí la cuestión, en ningún momento el filme transmite nada que no sea rutina, una aburrida rutina sin chispa ni alma más allá de ver en pantalla a tres veteranos actores (con el piloto automático, eso sí). Pues sí, un auténtico despilfarro, tan flojita que por mi ni aprueba...
  •  

Michael Myers

Película que reivindica la 3ª edad donde Pacino, Walken y Arkin se divierten como si tuvieran 20 años. Este argumento da pie a buenas escenas (como en las escenas en el prostíbulo o en la discoteca) y cuando la película por fin coge personalidad se hace más amena, pero no le salva de ser una película normalucha que está en el filo de ser considerado un bodrio.

5
Quizá en esos últimos días, el amó la vida con más intensidad que nunca, no sólo su vida, la de cualquiera, mi vida.
Y lo único que quería eran las mismas respuestas que el resto de nosotros: ¿De dónde vengo? ¿Adónde voy? ¿Cuánto tiempo me queda?
(Blade Runner)
  •  

Yeezus

De cuando el cine simplemente representa el paso de la amistad imperturbable, incorregible, indomable en su cauce mar adentro. Pacino, Arkin y Walken son los 3 actores que "Tipos Legales" necesita. Con otros el experimento seguro que hubiese salido diferente. No se busca nada más que contar una historia, y los lienzos que utiliza Fisher Stevens son maravillosos. Seguramente el personaje de Walken esté basado en él mismo, por el gusto por la pintura y los paisajes en las mismas. La amistad, la vida.
  •