El político (1949)

[princesadelguisante]

EL POLÍTICO (1949)

"La mierda es caprichosa y algunas veces se queda pegada"

FICHA TÉCNICA

TÍTULO ORIGINAL: All the King's Men
AÑO: 1949 
DURACIÓN: 109 min.
PAÍS: EE.UU.     
DIRECTOR: Robert Rossen
GUIÓN: Robert Rossen (Novela: Robert Penn Warren)
MÚSICA: Louis Gruenberg
FOTOGRAFÍA: Burnett Guffey (B&W)
REPARTO: Broderick Crawford, Mercedes McCambridge, John Ireland, Joanne Dru, John Derek, Shepperd Strudwick, Anne Seymour
PRODUCTORA: Columbia Pictures
GÉNERO: Drama | Política

PREMIOS

- 3 OscarS: Mejor película, actor (Crawford) y actriz secundaria (McCambridge)
- 1 Globo de Oro: Mejor película


SINOPSIS

La película narra la historia del ascenso y posterior caída política de Willie Stark. A lo largo del duro camino en la escala del poder, Stark perderá la inocencia del principio y se olvidará de sus humildes orígenes, y acabará siendo tan corrupto como aquellos a los que él justamente había criticado por esta actitud.

TRAILER

http://www.youtube.com/v/lyBBhMPQLYw&hl=es_ES&fs=1&

CURIOSIDADES

- La novela de Robert Penn Warren, en la que se basa la película, se publicó en 1946. Ganó el premio Pulitzer. El escritor y director Robert Rossen compró los derechos cinematográficos por su cuenta y luego fue capaz de llegar a un acuerdo con Columbia Pictures. Se cambió el enfoque de la novela, pasando la carga de la trama de Jack Burden (interpretado por John Ireland) a Willie Stark (Broderick Crawford).

- Para prepararse para el papel de Willie Stark, Broderick Crawford  analizó la personalidad del senador y ex-gobernador de Louisiana, Huey Long, en cuya vida se basa la novela.

- En el manuscrito original, el apellido es de Willie Talos, no Stark. Cuando la novela se publicó por primera vez, el nombre fue Stark. En 2001, la novela fue reimpresa con el nombre de Talos, entre otros cambios.

- Fue el debut cinematográfico de Mercedes McCambridge.

- El papel protagonista fue ofrecido a John Wayne, pero este se enfadó enormemente al leer el guión, pues suponía verter una jarra de ácido en el estilo de vida americano y discutió con Rossen de mala manera. Rossen también barajó a Spencer Tracy, que en 1958 interpretaría un político en "El último hurra", de John Ford.

- En 2006 se rodó un remake, titulado en España "Todos los hombres del rey", protagonizado por Sean Penn, Jude Law y Kate Winslet.

CRÍTICA

Robert Rossen ("El buscavidas", "Lilith") empezó en esto del cine como guionista. Su primera película como director y escritor fue "Cuerpo y alma" (1947) y la segunda "El político" (1949) en la que asume la dirección, el guión y la producción, por lo que, vista ahora, podría ser calificada casi como una película independiente. Si bien su título original es "All the king's men" (Todos los hombre del rey), se tradujo en España como "El político", aunque su remake de 2006 interpretado por Sean Penn, innecesario como casi todos, adopta la traducción literal.

La película cuenta con dos inconvenientes principales. El primero es el de la inevitable comparación con otra película sobre el ansia de poder, obra maestra y opera prima de Orson Welles, "Ciudadano Kane" (1941), que hace que esta película nazca relegada a un segundo plano. Otras películas destacables en esta línea política podrían ser "Caballero sin espada", "El último hurra", "Tempestad sobre Washington", "Todos los hombres del presidente", "Nixon", "City Hall, la sombra de la corrupción", "W." o "El desafío: Frost contra Nixon". El segundo incoveniente es que cuenta en poco tiempo demasiadas cosas y las encomiables rapidez, agilidad y eficacia de la narración juegan en detrimento del disfrute y poso del mensaje. Uno disfruta de diálogos y frases trufadas, pero cuando está a punto de asimilarlas y de reflexionar sobre ellas, la acción cambia casi frenéticamente de escenario y de momento temporal. En definitiva, mientras en otras películas la agilidad y concisión son una necesidad reclamada a gritos, en esta obra la dirección y montaje acelerados hubieran requerido un metraje más dilatado.

A pesar de estos dos defectos, sobre todo el segundo, "El político" es una película muy recomendable.

En primer lugar, por la maravillosa interpretación de Broderick Crawford que oscila camaleónicamente y de forma creíble entre un paleto honrado y un corrupto mafioso entre el principio y el final del filme, así como el notable debut de Mercedes McCambridge, ambos galardonados con el oscar a mejor actor protagonista y a mejor actriz secundaria, respectivamente.

En segundo lugar, por un guión acertado, que en ciertos tramos adquiere un cariz periodístico y, en otros momentos, una prosa elevada, directamente escogida de la novela escrita por Robert Penn Warren y ganadora del premio Pulitzer. Ejemplo de ello, son frases como "Vuestro deseo es mi fuerza y vuestra necesidad mi justicia", "La mierda es caprichosa y algunas veces se queda pegada", "La voluntad del pueblo es la Ley de este Estado", "El hombre es concebido en pecado y nace en la corrupción", "Es un derecho del pueblo que nadie le robe la esperanza", "Este Estado está lleno de personas que no llevan puesto precio. Cuanto más alto gritas, más alto es el precio", "¿Sabe usted de dónde sale el bien? Del mal".

En tercer lugar, porque trata un tema que nunca pasa de moda, como es la capacidad de corromper que lleva implícito el poder y la enorme distancia que media entre las palabras, la oratoria y el programa de un político y la forma en la que ha de mover los hilos en la sombra para conseguir realizaciones concretas, sacrificando los medios para alcanzar un fin determinado. Conocida es la frase que reza, "el poder corrompe, un poder absoluto corrompe absolutamente" y esta película lo muestra a la perfección. Willie Stark es un hombre honrado, humilde, que comienza su andadura política a escala local, denunciando los injustos beneficios que los comisionados obtienen de la construcción de obras públicas, como el colegio de la pequeña localidad de Kanoma, que se derrumba matando a varios niños. Esta circunstancia, hará que el pueblo alabe las críticas de Stark a los que tienen el poder en sus manos y usan y abusan de él sin escrúpulos. Se convierte, así, en el candidato ideal para hacer de hombre de paja en las elecciones a gobernador, bajo la máxima "divide y vencerás", basándose el partido en la escasa habilidad de Stark de captar la atención de los ciudadanos con sus veraces, pero aburridos discursos. Sin embargo, Stark llega a tomar conciencia de que está siendo utilizado y es en ese momento cuando decide dirigirse al pueblo de forma sincera, llana, utilizando su baja extracción social y su conocimiento de las verdaderas preocupaciones de los pobres. Lógicamente, alcanza rápida popularidad como encantador de las masas más desheredadas, iniciando una rápida ascensión política hasta que es elegido Gobernador. A partir de ese momento, el honrado personaje se empieza a tornar en un mafioso y chantajista que, en aras de alcanzar el bien para los pobres, no duda en pisar y comprar a quien se cruza en su camino, contratando a un periodista como esbirro de sus tropelías, rodeándose de sus hasta entonces enemigos y aprovechándose de sus familiares y admiradores.

Llama la atención que uno de los mayores vicios de la política e incluso de la democracia, como es el de retener el poder a todo coste, siga estando tan extendido en todos los países y sociedades y sea contemplado casi como una cualidad inherente al ejercicio del gobierno. Frente a ello, transparencia, sólo transparencia. Porque las sombras de la política son más oscuras que cien inviernos.

Recomiendo "El político" por la reflexión que implica su visionado y porque es una película próxima al "cine negro" que se realizó con plena libertad, con un cierto tono izquierdista, que llevó a su director a ser investigado por el Comité de Actividades Antiamericanas y a ser incluido en una lista negra en 1951. Sí, en plena era de la democracia y de la libertad y emancipación de los pueblos.

[Señor Lobo]

¿Por qué no echarán este tipo de pelis por la tele, con lo educativas que son? 

Ni la conocía, pero gracias por la recomendación. 

[Guevara]

Creo que yo tampoco la he visto. Al menos, no recuerdo nada de nada. Me la apunto.

Princesa....             

[princesadelguisante]

He de reconocer que yo tampoco la conocía, hasta que hicieron un ciclo de cine político y descubrí varias joyitas de este género, como "El último hurra", "El político" (que a pesar de no ser conocida ganó nada más y nada menos que el oscar a mejor película) y "Caballero sin espada" que acabo de verla y la comentaré en cuanto pueda.

Está bien ir descubriendo películas que, por unas razones u otras, son prácticamente desconocidas en nuestro país

[Mr. Self Destruct]

El remake de esta película hecha en el 2007 si mal no recuerdo, Todos los Hombres del Rey, que con un dream team de reparto (Sean Penn, Kate Winslet, Judd Law, Mark Ruffalo...) no le llegó ni a los talones a la original a la que nos referimos ahora.

No detenta la bravura del film de Rossen en ningún sentido, y el guión de El Político es magnífico, de una perfección clásica. Ciertamente nos encontramos ante una película que difícilmente pasará de moda, y es que la clase política se lleva comportando igual desde hace miles de años. Princesa gracias por recordarme esta peli, tengo gratos recuerdos de ella, sin dudas le daré un nuevo visionado  .

[Sullivan]

Me ha gustado la historia, los personajes, y todos los dilemas que plantea. Quizá le falla a la hora de meter dramatismo y que el desarrollo de la acción resulta un tanto frío y repetitivo. Aún así, muy interesante, deberían de proyectarla en todas las facultades de CC Políticas...

Un 6.5

[Banacafalata]

Copypasteo

Lo primero decir que es tan actual que podría rodarse hoy mismo. Lo segundo que el guión es una joya desde el principio (-Un político, ¿y qué tiene de particular? - Es un hombre honrado). Lo tercero es la fascinación que me produce el personaje de Will Stark y la portentosa interpretación de Broderick Crawford. La política, el lado sucio de la vida, de como el hombre honrado, descubre que el único camino para triunfar en la política es mancharse las manos, de cómo una vez que te las has manchado, aunque sea con las mejores intenciones, eres incapaz de lavartelas. De como cuando tienes todo, quieres más, de como cuando tienes el poder, tienes que sentir eres dios, una obra maravillosa, una final espectacular, y ante los ojos una historia casi vestida de cine negro que resulta tan actual que asusta. Un 9

[el_emi]

Me acuerdo más de los diálogos que de la trama

Cualquier cosa que trate de alguna u otra manera la debilidad de la naturaleza humana siempre llama poderosamente mi atención, venga de quien venga. Si tiene algún palito hacia la democracia, mejor. Es por eso que una película como la tan mítica y multi-premiada El Político (o Decepción, como llegó por estos lados) del afamado Robert Rossen significaba para mí una cita casi obligada.

Para los films que tratan de corrupción política y sobre los efectos corrosivos del  poder en los hombres, El Político aparece con pergaminos de sobra (tres Oscars) para ser una película de referencia. Lamentablemente ésta es un arma de doble filo: como suele ocurrirles a las cintas que inspiran otras cientos similares, su historia no parece gran cosa a los ojos del espectador que se pone frente a ella más de 60 años después.

Mucho del brillo que esta historia tuvo en su momento parece haber desaparecido por los efectos del tiempo. Alguna escena memorable se cuenta entre las excepciones, pero en general la trama transcurre de forma muy lineal, sin grandes variables en el camino hacia su inevitable desenlace y con algo de escasez de fuerza dramática en más de un tramo. Mucho de esto se debe a que lejos de ser una historia de corrupción de carácter intimista al mejor estilo Ciudadano Kane, donde podemos ver claramente como el camino que toma el protagonista lo lleva a convertirse en lo que acaba convirtiéndose, El Político adquiere una forma más similar a la denuncia. La política se nos presenta como un Agujero Negro que chupa de un lado a un hombre bueno y lo escupe del otro lado convertido en algo completamente distinto. Todo lo vemos desde fuera y lo repudiamos, pero nunca conectamos completamente con los personajes. Otro detalle es el siguiente: la denuncia se circunscribe demasiado a un momento específico de la historia estadounidense, sin meterse de lleno en cuestiones más profundas del régimen de gobierno, lo cual hace que en épocas como las actuales, muchos de los principios que se sostienen parezcan demasiado anticuados.

Por eso difícilmente El Político pueda considerarse más que una reliquia de carácter histórico, testigo de una época y de una forma de pensar. Eso, por supuesto no desmerece ni su fama, ni sus premios. La obra de Rossen es redonda como pocas, tiene un gran trabajo en el apartado del guión y una dirección sobria. Sin embargo si en algo destaca mucho es en el contundente trabajo de Broderick Crawford en el papel principal que es capaz de hacernos creer la conversión de un hombre idealista más bueno que el pan, en un inescrupuloso hombre de política. Merecido Oscar para él. El resto del reparto se deja ver. No me pareció ver nada especial en la oscarizada McCambridge, pero hace un gran trabajo.

Película que recomiendo, aunque no aseguro que entusiame.

6/10

[Tyrion]

Impresiona lo actual que es, a mi las actitudes me han recordado en todo momento a la de ciertos caciques, sobre todo los regionales. Sobre todo en ese truco demagógico de "Si me atacas a mi, estás atacando a la región entera/el pueblo/el proletariado". Bestial.
Me ha gustado, obviamente, el protagonista, y esa marimacho Mercedes McCambridge a la que le llevo vistas dos pelis en muy poco tiempo (la otra fue "Johnny Guitar") y de la que me quedo con ganas, viendo su filmografía, de que hubiera hecho más pelis.
En su contra, diría que le falta profundizar algo más en las relaciones entre los personajes, no están bien llevadas ni suficientemente explicadas, se mete poco en el terreno de la emoción y pega bastantes bandazos.
Nota: 7.75

PD: Es curioso que haya salido en el duelo con Orson Welles, porque por temática y ciertas cosas técnicas podría ser perfectamente una peli suya.