Steve McQueen: The Man & Le Mans

[Wanchope]

Steve McQueen: The Man & Le Mans

SINOPSIS:
En 1970, Steve McQueen era el rey de Hollywood. Tras el éxito de El caso de Thomas Crown y Bullitt (1968), nada podría hacerle caer. Amante del automovilismo, ahora podía hacer una película que sería la pasión de su vida. Su rodaje cambiaría su vida para siempre...


CRÍTICA: La leyenda renace

A principios de los años 70 Steve McQueen era una de las estrellas de cine más conocidas e importantes del mundo. Muy aficionado a la velocidad y aprovechando su envidiable situación laboral, se marchó hasta Le Mans para rodar la película de carreras más ambiciosa de la historia, 'Las veinticuatro horas de Le Mans'. Por sus huevos. Un sueño que le perseguía desde hacía mucho años y que se convirtió en una verdadera obsesión personal, hasta el punto de corroer a partes iguales los cimientos de su vida personal y su carrera profesional.

'Steve McQueen: The Man & Le Mans' es la trepidante crónica de un sueño convulso, y una obra imprescindible para los amantes de la velocidad, el citado actor reconvertido en uno de los iconos más rotundos de Hollywood o las leyendas puramente cinematográficas nacidas de aquellos valientes que han tentado a la suerte contra viento y marea. Como resume perfectamente el co-director Gabriel Clark, "la historia de ese rodaje es la de un héroe trágico. Es el retrato de un hombre profundamente orgulloso que llegó demasiado alto y decidió que estaba dispuesto a perderlo todo para cumplir su fantasía".

El plan inicial era filmar la auténtica carrera francesa desde todas las perspectivas posibles para, posteriormente, escribir un guión adaptándose al material conseguido. El propio McQueen pretendía participar en la carrera, si bien finalmente los organizadores se lo impidieron por culpa de una inoportuna lesión en el pie que había sufrido recientemente. Su director iba a ser John Sturges -'Los siete magníficos', 'La gran evasión'- y su guionista Alan Trustman -'El secreto de Thomas Crown', 'Bullitt'-, dos nombres de confianza que hasta ahora le había traído mucha suerte a McQueen. Todo prometía. Pero ya se sabe que la vida no tiene por qué atender a la voluntad de los hombres...

Por supuesto no vamos a entrar en más detalles que para eso ya está el propio documental. Pero en resumen y como suele ser habitual en estos casos, casi nada salió como estaba previsto, se rompieron muchas amistades y relaciones profesionales por el camino, se despilfarró un buen número de billetes en vano (o no) y en ningún momento el esfuerzo, sangre y sudor se vio recompensado por el éxito comercial, artístico o popular. Esto es, el caldo de cultivo ideal para hacer de 'Las 24 horas de Le Mans' una obra de culto digna de este documental, lo dicho, imprescindible para los amigos de la trastienda vital de cualesquiera empresa trágiza que suponga una indestructible voluntad de personal.

'Steve McQueen: The Man & Le Mans' es particularmente interesante por tres razones. En primer lugar y para los amantes de la velocidad, porque explica como se rodó una de las películas sobre carreras más auténticas e interesantes que han existido y existirán jamás. En segundo lugar y para los entusiastas de Steve McQueen, la obra desnuda a la persona detrás del mito con una humanidad poco habitual, capaz de dotar de auténtica dimensión a una figura tan carismática como a la vez cuestionable. Y en tercer lugar pero no menos importante, para los amantes del cine, porque funciona como retrato de una época hace tiempo olvidada en la que el éxito podía poner a Hollywood a los pies de un hombre, y una leyenda a los pies del mundo.

Nota: 7.25


Lo Mejor:
- Su energía

Lo Peor:
- No complementar su visionado con el de la propia película, 'Las veinticuatro horas de Le Mans'