La barrera invisible (1947)

[Guevara]

LA BARRERA INVISIBLE

Palabras como judío sucio o negro patán me ponen enfermo, sin importar quién las diga

FICHA TÉCNICA

Título Original: Gentleman's Agreement
Año: 1947
Nacionalidad: Estados Unidos
Dirección: Elia Kazan
Intérpretes: Gregory Peck, Dorothy McGuire, John Garfield, Celeste Holm, Anne Revere, June Havoc, Albert Dekker, Jane Wyatt, Dean Stockwell
Música: Alfred Newman
Fotografía: Arthur Miller
Productora: 20th Century Fox
Duración: 118 minutos

 

   

El director y parte de su reparto. Todos ellos nominados al Oscar

ANÉCDOTAS Y/O CURIOSIDADES

1) Otros carteles de la película:


2) La película fue ganadora de 3 Oscars: Película, Director y actriz secundaria (Celeste Holm). Además tuvo otras 5 nominaciones más: Actriz (Dorothy Maguire), actor (Gregory Peck), actriz secundaria (Anne Revere), pero se lo llevó su compañera de reparto, Celeste Holm, mejor guión adaptado y mejor montaje.

3) El Oscar a Elia Kazan fue el primero de su carrera. Posteriormente, en 1954, volvió a ganarlo con "Un tranvía llamado deseo" y, finalmente, en 1998, se le entregó el Oscar honorífico a toda una carrera. Este último Oscar estuvo rodeado de gran polémica porque a esas alturas ya se sabía que el director había sido uno de los confidentes de la "caza de brujas" y cuando subió a recoger el premio, ya ancianito, gran parte de los asistentes no aplaudieron y no se pusieron en pie para ovacionarlo, como es habitual en estas ocasiones.

4) El autor de la banda sonora, Alfred Newman, que no estuvo nominado por esta película, obtuvo el Oscar en otra nominación que tenía, a la mejor banda sonora para un musical por la película "Mother wore Rights".


SINOPSIS Y COMENTARIO PROPIO

Un escritor de estrafalario nombre, Schuyler Green (Gregory Peck), Phil para los amigos, viudo, se traslada con su madre y su hijo pequeño de California a Nueva York para trabajar en una serie de artículos que le ha encargado una prestigiosa revista de gran tirada. Los artículos han de tratar sobre el antisemitismo en los Estados Unidos, un tema que en principio no le entusiasma mucho porque piensa que está condenado al fracaso desde el principio y no se ve capaz de aportar nada nuevo que no se haya dicho ya. Sin embargo, el que su hijo de 10 ú 11 años no sepa qué es eso del antisemitismo, le ayuda a emprender el trabajo con renovado interés.

Mientras comienza a salir con la sobrina del editor de la revista, Kathy (Dorothy McGuire), le escribe una carta a su amigo David Goldman (John Garfield), que es judío, para que éste le cuente qué siente ante determinadas situaciones. Pero luego se da cuenta que lo mejor para saber qué siente un judío es "ser" un judío, así que empieza a hacerse pasar por tal en todas partes, ayudado por su madre, el editor y su novia, que son los únicos que están en el secreto.

No es ésta la mejor película de Elia Kazan para mi gusto. Leída la sinopsis parece un tema interesante y este director puso sobre el tapete varios temas comprometidos en sus películas. No sé cómo sería lo del antisemitismo en los Estados Unidos en aquellos años, porque siempre que nos han llegado películas de racismo o intolerancia se han referido a negros o a latinos. Y tampoco podemos comparar lo que sucede en la película con la situación en España, total nosotros nunca hemos tenido ningún problema con los judíos, desde que los echamos del país a patadas hace siglos. Cosas de tener una reina tan "católica" y la Inquisición en pleno auge.

Aún así, yo me imaginaba que iba a haber más chicha en el asador, y me ha decepcionado un poco. A ver, no es que esperara crucifixiones, pero es que durante la primera media hora de la película, hasta que él decide hacerse pasar por judío, no encontramos nada de lo que se nos prometía, lo cual es normal porque han de presentarnos los personajes y la situación, pero es que luego, hasta casi la media hora final, tampoco nos encontramos gran cosa porque sólo nos muestran tenues pinceladas aquí y allá, y el tema en general se diluye un poco por lo suave y ligero que nos lo ofrecen, entremezclado con los problemas que este tema de ser judío les plantea a la pareja protagonista.

Es por eso que me ha quedado la sensación de que he visto una película fallida, algo que empezó siendo muy interesante y luego sólo se quedó en apenas una declaración de intenciones, sosa y bastante anodina. La parte final, esa media hora larga de la que os hablaba antes resulta un poco más incisiva, de repente cobra mayor interés y tiene gran intensidad, pero la cosa se estropea un poco por el afán moralizante y educativo que pretenden darnos como colofón y, sobre todo, por ese final feliz que, seguramente por exigencias del público que gusta de estos The End, Kazan clavó y que a mí, concretamente, me sobra y creo que le resta un poco de credibilidad a la historia.

Otra opción puede ser el ineludible paso del tiempo. Igual en los años 40 levantó más de una ampolla, pero claro, vista hoy en día, ha perdido mucho. No lo sé. Aún así, merece la pena echarle un vistazo a la película aunque sólo sea por ver unas buenas interpretaciones, que otra cosa no tendría Kazan, pero era un estupendo director de actores, y tanto las tres actrices como mi admirado Gregory Peck, en un papel parecido en cierta manera al Atticus Finch de Matar a un ruiseñor, están estupendos.

En fin, que si la veis estando avisados y sabiendo que no vais a encontrar algo parecido a Un tranvía llamado deseo, tampoco es una mala película, no exageremos, y el tema, aunque ya os digo que presentado de una forma un tanto descafeinada, es muy interesante, lo que pasa es que no es una de esas películas que recomiendo encarecidamente porque me han entusiasmado, porque no lo ha hecho.

A los que os animéis a ver esta película, que la disfrutéis.   :guiñar